La guía definitiva para donar a pastor
La guía definitiva para donar a pastor
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The national chairs direct and supervise the activities of their committees with the assistance of the national vice chairs.
«En este artículo exploraremos algunos de los textos bíblicos más impactantes que hablan del amor
Estas dos virtudes, es asegurar, la humildad y la caridad, son tan indivisibles y tan inseparables, que quien se establece en una de ellas de la otra forzosamente se adueña, porque así como la humildad es una parte de la caridad, así la caridad es una parte de la humildad. Si nos paramos a mirar las cosas que el apóstol llamo estériles sin el bien de la caridad, observamos que esas mismas son también infructuosas si error la verdadera humildad.
El mal llamado “evangelio de la prosperidad” presenta el ofrendar como una forma de “negociar con Jehová”. Algunos dicen “ofrenda, para que Altísimo te bendiga”, otros dicen “ofrenda, o Dios te castigará”, y usan algunos pasajes fuera de contexto para justificarse. Recordemos que en el Antiguo Testamento las bendiciones materiales eran sombra y figura de las bendiciones espirituales bajo el Nuevo Pacto.
Jehová usa el esfuerzo, el tiempo, y las ofrendas de los creyentes para traer fruto espiritual en su tiempo. No veamos las ofrendas como hacienda perdido, sino como fortuna invertido en una causa con implicaciones eternas.
La caridad nos anima a aventajar el presunciónísmo y el interés propio, y nos lleva a adoptar una postura de servicio alrededor de los demás.
Esto significa que el diezmo no está conexo únicamente a la ralea del Antiguo Testamento, sino que es una ejercicio que precede a la ley y tiene un sentido espiritual.
La caridad nos lleva a cuestionar las desigualdades sociales y a trabajar por un mundo más ajustado y equitativo.
En el civil, era el derecho que tenía el rey a percibir el 1O% del valor de todos los artículos que eran objeto de mercadería traficada y que, si arribaban a puerto, se llamaban diezmos de la mar; o diezmos de puerto seco si entraban por tierra, allí donde no estuviera establecido el almojarifazgo, tributo que se pagaba por las mercaderíFigura que cloruro sódicoían del reino, por las que entraban en él, o por las que a fantastic read iban en tránsito de un reino a otro de España.
El diezmo es una guisa de poner a Jehová en primer sitio en nuestras vidas. Cuando priorizamos nuestras finanzas y entregamos nuestro diezmo ayer que cualquier otra cosa, estamos demostrando nuestra dependencia de Jehová y nuestra confianza en que Él suplirá todas nuestras deyección.
En prontuario, el mandato bíblico del diezmo y la ofrenda es un llamado a ser fieles y generosos con nuestros fortuna. A través de estas prácticas, demostramos nuestra confianza en Alá como nuestro proveedor y contribuimos al avance de su reino en la Tierra.
Si mirásemos a nuestro en torno a, encontraríamos quizá razones para pensar que la caridad es una virtud ilusoria. Pero, considerando las cosas con sentido sobrenatural, descubrirás también la raíz de esa esterilidad: la marcha de un trato intenso y continuo, de tú a Tú, con Nuestro Señor Redentor; y el desconocimiento de la obra del Espíritu Santo en el alma, cuyo primer fruto es precisamente la caridad (S. JOSEMARÍA ESCRIVÁ, Amigos de Altísimo, 236).
Cuáles son las Cuatro Leyes Espirituales fundamentales Cómo se define la maldad en la sociedad y cuál es su origen
Es fundamental entender que el diezmo y la ofrenda no son simplemente una obligación o un impuesto religioso, sino una expresión de apego y fidelidad alrededor de Todopoderoso.